Monte de Poyales

  • 14 marzo, 2022

Óleo sobre lienzo

114 x 146 cm

En Poyales del Hoyo, en Ávila, el monte vibra a la tarde. El recuerdo de un día de verano, caminando por las rocas bajo los pinos, viendo la luz del sol colarse entre las copas de los árboles, bañándonos en el río. Fue un día de felicidad intensa. Eran ganas de sentir, de vivir. Éramos afortunados.

Fue un cuadro muy difícil de terminar. Salirme de la mímesis y dejar volar la imaginación, y a falta de experiencia usar la intuición, prueba y error. Dejar que los colores volaran manteniendo la lógica de la iluminación.